Metastilismo : Un viaje sonoro entre el minimalismo repetitivo y la experimentación caótica

 Metastilismo : Un viaje sonoro entre el minimalismo repetitivo y la experimentación caótica

“Metastilismo”, compuesta por el visionario compositor argentino Gustavo Santaolalla en 1982, se erige como una pieza emblemática dentro del panorama experimental de la música latinoamericana. Su carácter único reside en la fusión magistral de elementos minimalistas repetitivos con explosiones de experimentación sonora caótica, creando un universo auditivo donde la lógica cede paso a la intuición y la emoción.

Para comprender la magnitud de “Metastilismo”, es crucial adentrarnos en el contexto histórico en el que nació esta obra maestra. La década de los 80 fue una época de efervescencia creativa para la música experimental, impulsada por artistas como Brian Eno, Philip Glass y Steve Reich, quienes exploraban nuevos territorios sonoros a través de patrones repetitivos, armonías inusuales y el uso innovador de instrumentos electrónicos.

En Argentina, Santaolalla se erguía como un líder incuestionable en esta revolución sonora. Tras su paso por la banda de rock progresivo Arco Iris, donde desarrolló sus habilidades musicales, Santaolalla abrazó la experimentación como su lenguaje principal. Su obra, marcada por una profunda conexión con el folclore argentino y una visión futurista de la música, trascendió las fronteras geográficas para inspirar a generaciones de músicos.

“Metastilismo” es un testimonio vivo de esta búsqueda incansable de Santaolalla por expandir los límites de la expresión musical. La pieza comienza con un motivo melódico simple que se repite cíclicamente, generando una sensación de hipnosis y quietud. Poco a poco, otros sonidos se van incorporando: sintetizadores que emiten texturas ondulantes, percusiones que laten con intensidad variable, y voces distorsionadas que flotan como espectros sobre la base rítmica.

A medida que la pieza progresa, la tensión aumenta. El minimalismo inicial da paso a una explosión caótica de sonidos, donde los patrones repetitivos se desintegran en un torbellino de energía sonora. Es como si Santaolalla estuviera explorando las profundidades del inconsciente colectivo, revelando emociones primarias a través de la música.

La belleza de “Metastilismo” radica en su capacidad para provocar una experiencia sensorial profunda y única. No se trata de una pieza que busca complacer al oyente con melodías agradables o ritmos pegadizos. Más bien, invita a sumergirse en un universo sonoro donde lo racional cede paso a la intuición y la emoción.

Para ilustrar mejor la estructura de “Metastilismo”, podemos analizarla en tres secciones principales:

Tabla 1: Estructura de “Metastilismo”

Sección Descripción Duración aproximada
Sección 1 (Minimalista) Un motivo melódico simple se repite cíclicamente, generando una sensación de hipnosis y quietud. Se incorporan gradualmente sonidos atmosféricos como sintetizadores y percusiones. 3 minutos
Sección 2 (Transición) La intensidad aumenta progresivamente a medida que los patrones repetitivos se fragmentan y se introducen nuevas texturas sonoras. Las voces distorsionadas comienzan a aparecer. 5 minutos
Sección 3 (Caótica) Una explosión de sonidos caóticos domina la escena sonora. Los patrones melódicos originales desaparecen, dando paso a una experimentación total. La energía sonora alcanza su punto máximo. 7 minutos

Total: 15 minutos

Escuchar “Metastilismo” es embarcarse en un viaje auditivo único. Es como explorar un paisaje onírico donde la lógica cede paso a la intuición, y las emociones se expresan a través de una explosión de sonidos inesperados. Santaolalla nos invita a dejar atrás nuestras expectativas y sumergirnos en un universo sonoro donde lo racional no tiene cabida.

Para los curiosos:

  • Si te gusta “Metastilismo”, te recomiendo explorar otras obras de Gustavo Santaolalla, como “Camino al Cielo” o la banda sonora de la película “Brokeback Mountain”.
  • También puedes investigar sobre otros compositores experimentales latinoamericanos como Luis Andriessen y Alberto Ginastera.

Prepárate para una experiencia sonora que te dejará sin aliento.